¿Sabías que el uso indiscriminado de sustancias químicas como el Paraquat -herbicida no selectivo- puede causar abortos, afecciones respiratorias, dermatitis, disfunción del sistema endocrino y cáncer?
Este cuadro grave de enfermedades forma parte de la realidad sanitaria de las poblaciones rurales que durante los últimos 50 años han adoptado el uso de sustancias químicas tóxicas como herbicidas y plaguicidas para combatir los ataques de plagas y malezas que afectan sus cultivos agrícolas.
Ante esta inminente situación que amenaza la salud de la humanidad y el equilibro del planeta, el Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (Ivic) realizó un conversatorio para tratar el rol de los agrotóxicos en la salud humana y ambiental de comunidades agrícolas, con el propósito de integrarse al debate mundial sobre la necesidad de erradicar estas prácticas nocivas.
Los reconocidos doctores Damián Marino, representante del Departamento de Química de la Universidad Nacional de la Plata, y Medardo Dávila, integrante de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Córdoba, desde Argentina se sumaron a la disertación haciendo uso de la teleconferencia.
Marino dedicó su participación a la caracterización bioquímica de los agrotóxicos más utilizados en las comunidades agrícolas argentinas, entre las que destacó el glifosato; mientras que Dávila ilustró los impactos de los agrotóxicos en la salud ambiental.
Asimismo, la toxicóloga de la Ciudad Hospitalaria “Dr. Enrique Tejera” de Valencia, estado Carabobo, Isaura Moleiro de Ovalle, durante su ponencia: “Impacto de los Agroquímicos en la Salud Humana”,explicó que los agrotóxicos son un conjunto de sustancias químicas que además de matar plagas y erradicar malezas, entran al organismo ya sea por contacto directo o ingesta accidental, y ocasionan intoxicaciones, reacciones alérgicas, afecciones de la piel, entre otras enfermedades.
“Queremos visibilizar las consecuencias negativas de las soluciones tecnológicas ofrecidas por un grupo de empresas transnacionales que en un intento de mejorar el rendimiento agrícola, lo que hicieron fue crear un problema para la salud y el medio ambiente”, puntualizó el organizador del conversatorio, Eder peña, investigador del Centro de Ecología – Ivic.
Por su parte, el jefe de Laboratorio de Suelos – Ivic, Saúl Flores, destacó la responsabilidad que tienen como científicos, para promover actividades como foros y encuentros, en función de educar a la población y los agricultores sobre el uso de pesticidas y fungicidas, los cuales tienen efectos altamente negativos tanto en la salud como en el ambiente, tras considerar que “no todo lo que crea el hombre es bueno”.
Finalmente, los expositores hablaron sobre la importancia de promover opciones como la agroecología para que la economía campesina no siga dependiendo de insumos nocivos al momento de realizar sus cosechas.
Entre las soluciones mencionadas por Pedro García, miembro de la Cooperativa Alianza- Las Lajitas de la comunidad Monte Carmelo – estado Lara, se encuentra el cultivo en conucos, el uso de biofertilizantes, compuestos de materia orgánica fermentada y el empleo de bacterias y hongos beneficiosos como el Trichoderma harzianum o las Micorrizas arbusculares.
Fuente: Leidy Martínez, Fotos: Marie Fuzeau / Prensa IVIC
No hay comentarios:
Publicar un comentario