SAIOA ECHEAZARRA | VITORIA.
La doctora defendió ayer los beneficios de andar en bicicleta en una charla enmarcada dentro de la Semana de la Movilidad
June Ibarguchi Médico
Del sillín a la consulta y de la consulta al sillín. Así transcurre el día a día de June Ibarguchi, doctora en medicina familiar y habitual usuaria de la bici en la capital alavesa. Esta vitoriana de 29 años desveló ayer en la conferencia 'La salud sobre dos ruedas' que impartió en el centro cívico de Lakua la docena de beneficios para la salud que reporta la práctica de este deporte, un acto enmarcado en la Semana Europea de la Movilidad Sostenible. Entre otras ventajas, pedalear «previene el riesgo de infarto, la osteoporosis y ayuda a bajar peso», incide la médico.
-¿Qué beneficios para la salud produce la práctica ciclista?
-En total, son doce. Beneficia al sistema circulatorio, porque disminuye el riesgo de tener un infarto o una trombosis cerebral. Además, baja la tensión, previene las lesiones de espalda, la osteoporosis y la degeneración de las articulaciones. Ayuda a perder peso porque mejora el metabolismo y beneficia a la función pulmonar. También mejora la psicomotricidad, la fuerza del tono muscular y la flexibilidad. Es un tratamiento rehabilitador principalmente indicado para lesiones de pierna, pie y la región lumbar.
-Mens sana in corpore sano', dijo un poeta romano. ¿Pedalear también es bueno para el estado de ánimo?
-Es un ejercicio antiestrés que sube el ánimo y aumenta la autoestima. De hecho, pedalear es uno de los mejores antidepresivos porque te relacionas con el medio y eres capaz de desplazarte por tu propia mecánica. Aparte, andar en bicicleta propicia la sociabilidad y la relación interpersonal. Por ejemplo, es de gran ayuda en caso de minusvalías físicas o psíquicas. Aunque no está demostrado, también se cree que estimula el sistema inmune, porque todo lo que sube el ánimo refuerza las defensas.
-Si no se practica de forma adecuada, el ciclismo puede causar lesiones. ¿Cómo evitarlas?
-La bicicleta debe estar adaptada a la altura del usuario, y el pedal de más abajo debe quedar a la misma distancia que la pierna estirada. Además, la espalda tiene que estar erguida.
-Están de moda las rutas como el Camino de Santiago, que suponen recorrer sobre dos ruedas varios kilómetros durante numerosas jornadas. ¿Qué aconseja a quien desee realizar este tipo de itinerarios?
-No es bueno para la salud si no se ha entrenado previamente. Cada uno debe practicar el ciclismo según sus posibilidades, y lo más importante si se quieren obtener beneficios es la regularidad. En concreto, se recomienda andar en bici tres horas a la semana. En cualquier caso, deben recorrerse rutas adaptadas a la edad y la forma física de cada persona. Si es alguien que empieza desde cero, debe hacerlo de forma progresiva e ir aumentando la duración del ejercicio diez minutos cada día.
Menos contaminación
-¿A qué enfermos recomendaría este deporte?
-A personas con varices, problemas circulatorios y dolores lumbares y de espalda. También a quien padece hemorroides -salvo en momentos de dolor-, porque es un ejercicio que estimula la circulación y eso reduce la inflamación. Incluso le puede servir de rehabilitación a quien ha sufrido un infarto, si lo hace después de 3 ó 6 meses y de forma progresiva.
-No cabe duda de que la bicicleta es un medio práctico y saludable para desplazarse por la ciudad, pero ¿no resulta contraproducente circular en una carretera llena de coches y polución?
-Es lo mismo que cuando caminamos por la calle. La polución está ahí y no podemos evitarla. Pero precisamente se trata de eso. Si más gente utilizara los medios sostenibles como la bici o el transporte público, habría menos contaminación, y evidentemente es conveniente evitar las zonas con más tráfico. Pero Vitoria goza de una buena y extensa red de carriles bici que aún está en proceso, por lo que es una ciudad apta para esta práctica.
-¿Qué opina sobre la normativa actual al respecto?
-Supongo que llegará un punto en que tendrá que regularse, porque hay gente que circula por la acera en bici a gran velocidad. Del mismo modo, pediría a los que van caminando que no invadan los carriles para ciclistas, algo muy frecuente en la capital alavesa. Eso ocurre porque la gente no está concienciada con el uso de la bicicleta.
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