Las sequías y el aumento de las temperaturas que provocan el calentamiento global en Sudamérica, considerada una despensa del mundo, afectarán a futuro la seguridad alimentaria de todos, según alertó hoy la FAO.
No es un tema de futuro sino del presente y los impactos son mucho mayores de lo que pensábamos. Las repetidas sequías, como la vivida actualmente en el sur de Brasil, es ya una señal de que el cambio climático no es cosa del futuro.
América del Sur se ha convertido en el granero del mundo. El impacto sobre Sudamérica afecta la seguridad alimentaria del planeta. Y ya lo estamos viendo.
¿Cómo afectará el cambio climático a nivel económico? Principalmente reintroduciendo la incertidumbre.
SSe tenía la idea de que el mundo se había convertido en un gran supermercado, que uno podía comprar lo que quería cuando quería. (…). Habíamos logrado una situación de pleno abastecimiento. Ahora el cambio climático reintroduce el tema de que no sabemos qué va a pasar.
La incertidumbre afectará a todo el comercio, determinará la volatilidad de los precios internacionales de los ‘commodities’, y la casi obligación de los países a asegurar el abastecimiento interno, con políticas que ya se habían abandonado como tener stocks de emergencia.
Sin embargo, en la región que más alimentos produce, el hambre hoy no es un problema de producción, sino de acceso, por bajos ingresos, y falta de recursos como tierra o agua.
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