“¿ Es saludable lo que llega a nuestras bocas?” es el anterior
post que presenta una introducción acerca de la industria alimentaria en
nuestros días e invita a la reflexión sobre el origen de los alimentos y las
consecuencias socio-ambientales que tiene nuestra elección
culinaria.
El segundo post dentro del tema de la industria
alimentaria explica porqué los alimentos transgénicos tienen consecuencias tan
negativas para nuestra salud, la ecología del planeta y para la
sociedad.
Un transgénico u Organismo Modificado Genéticamente (OMG) es un organismo al que se le han manipulando sus genes con el fin de proporcionarle una característica específica.
Un transgénico u Organismo Modificado Genéticamente (OMG) es un organismo al que se le han manipulando sus genes con el fin de proporcionarle una característica específica.
La
manipulación genética consiste en aislar
segmentos del ADN (el material genético) de
un ser vivo(bacteria, vegetal, animal e incluso humano) para
introducirlos en el de otro. Por ejemplo, el maíz transgénico que se
cultiva en España lleva genes de bacterias, que son capaces de producir una
sustancia insecticida8.
El
90% del comercio de las semillas transgénicas esta controlado por la empresa
norteamericanaMonsanto y
es también de las mayores empresas que producen herbicidas para estos
cultivos12. El
control de las semillas es un objetivo claro de las transnacionales,
porque quien las controla, tiene la
llave de toda la cadena alimentaria.
Plantas
modificadas para resistir plagas, o con sustancias herbicidas han permitido un
aumento en la producción de cultivos a gran escala y enriquecimiento
económico de las empresas que las comercializan. En el siguiente nivel
estarían las empresas que procesan los granos, Archer
Daniels Midland (ADM), Bunge, GrupoMaggi, además de cría de ganado y
procesado de carne como Cargill.
El 90% de la soja transgénica que se planta en Sudamérica es para producir
piensos y alimentar
al ganado europeo: carne barata con destino a los supermercados y
restaurantes de comida rápida7.
Cinco
países producen el 95% de alimentos transgénicos: EEUU, Argentina,
Canadá, China y Brasil. Desde que se aprobó en 1998, España es el único estado
miembro de la UE que permite el cultivo del maiz transgénico MON810 a escala
comercial.
Efectos
no intencionados pueden ser parcialmente predecibles
si se sabe dónde se inserto el nuevo gen, mientras que otros efectos son totalmente
impredecibles debido al limitado conocimiento que se tiene sobre la
regulación de los genes y las interacciones entre éstos.
Algunos
de los efectos adversos encontrados para la salud ha sido la aparición
de nuevas alergias, toxicidad renal y hepática13,14.
Especies transgénicas pueden reproducirse con especies salvajes creando nuevos especímenes,arriesgando la integridad de las especies naturales y nuestra alimentación.
Especies transgénicas pueden reproducirse con especies salvajes creando nuevos especímenes,arriesgando la integridad de las especies naturales y nuestra alimentación.
Este
hecho ya ha sido demostrado por David Quist e Ignacio Chapela en 2001 quienes
publicaron en la revista Nature,
cómo variedades naturales de maíz mexicano habían sido contaminadas con plantas
transgénicas comprometiendo la integridad de la especie11. El
artículo fue retirado de la revista poco tiempo después debido
a la polémica y a las discusiones surgidas con su publicación que Natureprefirió
rechazarlo y mantenerse al margen. La primera vez en la historia de esta
prestigiosa revista que se retracta de un artículo ya publicado y revisado,
sospechoso ¿no?
Por
si eso fuera poco,
los herbicidas de amplio espectro que
se usan para proteger los cultivos transgénicos matan
indiscriminadamente todas las plantas, dejando intactas sólo las cosechas
transgénicas (como ejemplo el Glifosato usado sobre cultivos de soja
transgénica Roundup
Ready creada por la empresa norteamericana Monsanto).
Sus
efectos no quedan confinados a los campos de cosechas, su aplicación en forma de
pulverización puede transportarlos hasta vegetaciones
salvajes colindantes, especialmente cuando se emplean aviones de
fumigación aérea o pueden ser transportados por la lluvia hacia los ríos
diezmando peces y organismos acuáticos.
Esta
destrucción innecesaria puede
producir una alarmante
disminución de la diversidad de la flora salvaje con consecuencias
dañinas para insectos, aves y mamíferos que dependen de las plantas
afectadas7.
Donde
crece soja transgénica se
incrementa el uso de herbicidas y las cantidades totales aplicadas. Se
espera un aumento del uso de herbicidas al desarrollar las malas hierbas una
tolerancia al Roundup,
tal como ha ocurrido en Argentina y EE.UU7.
El
cultivo de soja ha causado ya la deforestación de
21 millones de hectáreas de bosques en Brasil, 14 millones de hectáreas en
Argentina y sigue en aumento1.
Lo
que se está destruyendo por la demanda mundial de soja barata es mucho más que
uno de los hábitats más ricos en especies del planeta. Los científicos describen
el bosque tropical más grande del mundo como el aire acondicionado del planeta:
la humedad de la región es vital para la
regulación del clima y los patrones de refrigeración de Sudamérica, y de
todo el mundo10.
En
lugar de absorber y almacenar el excedente de CO2 procedente
de la atmósfera, la Amazonia se ha convertido ahora en una
fuente importante de contaminación por CO2 procedente
de la quema de árboles y de la descomposición de la vegetación7.L
La deforestación para expandir cultivos como el de la soja, conlleva el desplazamiento de comunidades y pueblos que dependen de los bosques. El bosque tropical les proporciona alimento y cobijo así como herramientas y medicinas. El avance de los transgénicos los ha expropiado de sus tierras.
La deforestación para expandir cultivos como el de la soja, conlleva el desplazamiento de comunidades y pueblos que dependen de los bosques. El bosque tropical les proporciona alimento y cobijo así como herramientas y medicinas. El avance de los transgénicos los ha expropiado de sus tierras.
Se
sabe con certeza del uso de mano
de obra esclava para limpiar bosque preparándolo para la agricultura. Las
zonas de Mato Grosso y Pará, los dos estados de la Amazonia pioneros de la
frontera de la soja, son responsables de más de la mitad de la mano de obra
esclava de Brasil. Entre 2003 y 2004, el gobierno brasileño informó de la
presencia de casi 8.700 esclavos en los dos estados7.
Las
semillas transgénicas estan patentadas, por lo que los agricultores tienen que
pagar gran cantidad de dinero para adquirirlas y no pueden aprovechar las
semillas de la siguiente generación. Esto hace de los cultivos transgénicos, un
sistema totalmente dependiente
de la empresa productora y nada sustentable.
El
maíz, la soja transgénica y sus derivados están presentes
en más del 60% de los alimentos procesados como chocolates, papas fritas,
margarina y platos preparados.
Además,
llegan a nosotros indirectamente, ya que la soja transgénica es convertida en
piensos para alimentar al ganado.
Ingredientes
y aditivos de tener un origen sospechoso son8 :
● Soja:
harina, proteína, aceites y grasas (a menudo se ‘esconden’ detrás de la
denominación aceites/grasas vegetales), emulgentes (lecitina–E322), mono y
diglicéridos de ácidos grasos (E471), ácidos grasos.
● Maíz:
harina, almidón, aceite, sémola, glucosa, jarabe de glucosa, fructosa, dextrosa,
maltodextrina, isomaltosa, sorbitol (E420), caramelo (E150),
grits.
Evita
comprar las marcas que los utilizan. Haz click en La Guía Roja y Verde de Alimentos Transgénicos de Greenpeace.
La guía se ha hecho en base a los alimentos que se comercializan en España, pero
también aparecen marcas multinacionales. Mira las etiquetas, en Europa es
obligatorio etiquetarlos, pero no en todos los países, por ejemplo
EEUU.
Siempre
que puedas, adquiere alimentos
ecológicos (orgánico o biológico) que te aseguran cultivos libres de
transgénicos y responsables con el medio ambiente, tu salud y el bienestar
animal.
Recomiendo
el Documental El
Mundo según Monsanto por la periodista Marie-Monique Robin. Documental que
señala el peligro de los cultivos transgénicos para nuestra salud y el medio
ambiente asi que cómo el fraude y la corrupción detrás de este sistema
agrario.
Se
puede ver entero aquí.
Referencias
1. Altieri, A., Bravo, E. 2009.La tragedia social y ecológica de la producción de agrocombustibles en el continente Americano. Red por una América Latina Libre de Transgénicos.
2. Altieri, M.A. and W. Pengue 2006 GM soybean: Latin America’s new colonizer. Seedling January issue.
3. Cellini, F.,Chesson, A., Colquhoun, I., Constable, A., Davies, H.V., Engel, K.H., Gatehouse, A.M.R., S. Kärenlampi, Kok, E.J., Leguay, J-J., Lehesranta, S., Noteborn, H.P.J.M., Pedersen, J., Smith, M. 2004. Unintended effects and their detection in genetically modified crops. Food and Chemical Toxicology 42 1089–1125.
4. Cockburn, A. 2002. Assuring the safety of genetically modified (GM) foods: the importance of an holistic, integrative approach. Journal of Biotechnology 96. 79-106
5. Crop Life Latin America. http://www.croplifela.org/es/cultivos-transgenicos-en-el-mundo.html
6. GMO Compass. http://www.gmo-compass.org
7. Greenpeace Internacional. 2006. Devorando la Amazonia.
8. Greenpeace España. 2010. Guía roja y verde de alimentos transgénicos.
9. Moutinho, P. 2008. Tropical Forest, Deforestation and Climate Change: The Amazon Case. Instituto de Pesquisa Ambiental da Amazônia.
10. Moutinho, P., Schwartzman, S. 2005. Tropical deforestation and Climate Change. Instituto de Pesquisa Ambiental da Amazônia.
11. Quist, D., Chapela, I.H. 2001. Transgenic DNA introgressed into tradicional maize landraces in Oaxaca, Mexico. Nature, vol 414.
12. Ribeiro, S. Investigadora del grupo ETC. http://www.reluita.org/agricultura/transgenicos/asalto_a_la_soberania.htm
13. Séralini, G., Cellier, D., Spiroux de Vendomois, J. 2007. New Analysis of a Rat Feeding Study with a Genetically Modified Maize Reveals Signs of Hepatorenal Toxicity. Arch. Environ. Contam. Toxicol. 52, 596–602
14. Domingo, J.L. 2007. Toxicity Studies of Genetically Modified Plants: A Review of the Published Literature. Critical Reviews in Food Science and Nutrition, 47:721–733
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